El impacto de la inflación en los deportes profesionales 

El impacto de la inflación en los deportes profesionales

Burgos, 24 de junio del 2022.-   Según Palco23, el deporte encara el curso con una subida de precios histórica. El sector, que tradicionalmente había destacado por tener una inflación moderada, encara ahora una situación inédita. Después de que las tensiones comenzasen ya el año pasado, con una subida de precios de materias primas y logística, acrecentada por disrupciones en la cadena de suministro, algunas compañías de equipamiento deportivo como Adidas o Skechers han encontrado una única solución para afrontar sus problemas: subir precios.

Ahora se añade todavía más presión por el estallido de la guerra en Ucrania, que ha disparado los costes energéticos y ha tensionado aún más la cadena de suministro. La electricidad ha llegado en marzo en España a su máximo histórico, alcanzando los 547 euros el megavatio por hora el pasado 8 de marzo. El barril de petróleo estaba el pasado 11 de marzo a 118,46 euros, frente a los 94,21 euros de febrero, mientras que el precio de la gasolina encadena ya su séptima semana consecutiva de récord.

En febrero, justo después del estallido de la guerra (que ha actuado como catapulta de los precios de la energía), el Índice de Precios al Consumo (IPC) de los equipos para deporte (en el que se encuentran productos como las raquetas de tenis) anotó su mayor alza desde el comienzo de la serie estadística en enero de 2017, con un incremento del 3,6%.

Dentro del sector deportivo en España, la fabricación de bicicletas fue el motor de la inflación, con un alza del 6,7% respecto al año anterior. A pesar de ir reduciendo ligeramente su encarecimiento en los últimos tres meses, la fabricación de este tipo de artículos se mantiene desde hace tres años por encima de la tasa del 6,5%.

Por otra parte,  el fitness se encuentra entre los diecinueve grandes sectores que han percibido un impacto significativo por la inflación de costes en los sectores de la economía española, según el Observatorio Sectorial DBK de Informa.  Para realizar este informe se han analizado 600 actividades económicas diferentes y  en 42 grandes sectores divididos según el tipo de impacto: fuerte, significativo y moderado. El informe considera que hay once sectores que han percibido un impacto fuerte y otros doce que han percibido un impacto moderado.

Entre los sectores que han percibido un impacto significativo también se encuentran los carburantes más caros y el ascenso de precios de otros insumos, como los fertilizantes, repercuten en el sector agrícola. La industria alimentaria también sufre un efecto negativo en sus márgenes ya que compra más caras las materias primas.

Por otro lado, automoción y fabricación de maquinaria se enfrentan a los problemas de suministro de determinados componentes, ya que Rusia y Ucrania son dos países con importante actividad siderúrgica y de producción de otros metales. Se suman a estos sectores, a causa del alza del coste de las materias primas y la textil y confección y cuero, impresión y artes gráficas, industria química de consumo y otros productos, producción de productos metálicos, electrónica y material eléctrico, fabricación de muebles, actividades de edición y gestión de residuos.

La industria del deporte aporta un 3,3% del PIB y genera alrededor de 414.000 puestos de trabajo, lo que supone el 2,1% del empleo, 

Según el informe Termómetro del ecosistema del deporte en España, elaborado por PwC y la Fundación España Activa y presentado este lunes en la sede del Consejo Superior de Deportes. Estas dos cifras son un ejemplo muy claro del impacto que tiene esta industria en la economía española y en la generación de empleo, pero su influencia va mucho más allá de ellas.

Los datos del INE reflejan que en 2018 (último año disponible) la industria del deporte generó de manera directa una actividad económica de 15.768 millones de euros de producción y 195.027 puestos de trabajo a través de más de 37.231 empresas. Todo ello equivale al 1,3% del PIB nacional y al 1% de la población ocupada en España durante 2018. Sin embargo, la aportación de esta área a la economía trasciende su aportación directa. Así, gracias a su impacto indirecto se generaron 16.432 millones de euros y gracias al inducido, 6.917 millones de euros adicionales. De esta manera, a los empleos que se generan de manera directa habría que sumarles 157.460 puestos de trabajo creados de forma indirecta y 61.479 más si se tienen en cuenta los generados de manera inducida.

El deporte tiene también un efecto multiplicador en la economía española, pues por cada euro facturado se generan 1,5 euros de ingresos adicionales en el resto de la economía. Este crecimiento también repercute positivamente en el empleo: por cada millón de euros facturados por la industria del deporte se generan 26 puestos de trabajo en España (entre los directos, los indirectos y los inducidos).

Por ámbitos, la facturación de los clubes es la más elevada dentro del impacto directo, ya que estos tienen una repercusión de 5.881 millones de euros, seguida de la de las tiendas especializadas (4.988 millones de euros), las instalaciones deportivas (2.508 millones de euros), los gimnasios (662 millones de euros) y la fabricación de artículos y prendas deportivas (241 millones de euros). Otras actividades, como la promoción de eventos, ligas u órganos reguladores se traduce en casi 1.487 millones de euros.

En términos de empleo, no obstante, son las instalaciones deportivas las que se sitúan a la cabeza. Estas emplean a 57.400 personas, lo que se traduce en el 29% del empleo total de la industria deportiva. En segunda posición se encuentran los clubes, con un total de 47.114 trabajadores, las tiendas deportivas (39.960) y los gimnasios (27.495). Por cada millón de euros que la industria factura en España se generan 12,4 empleos directos en el país, una cifra un 30% superior a la media nacional. Aquí son los gimnasios los que más emplean por facturación. Así, estos cuentan con 42 trabajadores por cada millón de euros generado. Las instalaciones deportivas, con 23 empleos, se mantienen en segundo lugar.

En cualquier caso, el impacto del deporte en la sociedad trasciende su influencia en la economía, puesto que la actividad física repercute directamente en la salud y el bienestar de los ciudadanos. Es por esto que durante la presentación del informe los expertos insistieron en no quedarse en las cifras y reflexionar sobre los beneficios sociales que conlleva contar con una población más activa. Así lo expuso el presidente de la Fundación España Activa, Jaime Lissavetzky: “Hay que destacar la importancia del deporte no solo como sector económico o como activo presente, sino también para el futuro. Si miramos solo desde una óptica economicista, tendremos una visión miope de lo que es el sector”.

Es por esto que el informe no se limita a contener datos cuantitativos sobre el impacto económico de la actividad, sino que recoge entrevistas y testimonios de numerosos expertos en la materia para que puedan aportar un punto de vista cualitativo sobre los beneficios de la práctica deportiva. Una visión que también compartió la presidenta del Consejo Superior de Deportes (CSD) y secretaria de Estado para el Deporte, Irene Lozano. “Hay muchas herramientas que generan un impacto económico positivo en la sociedad, pero dejan cierto residuo tóxico, negativo. El deporte, sin embargo, tiene mucho impacto positivo y muy poco negativo”.

La portavoz del CSD hizo hincapié en que conceder una mayor relevancia al deporte requiere de un cambio cultural que, como tal, necesita tiempo y cautela. “Lo positivo de los cambios culturales es que son lentos, pero una vez que se empieza a mover la bola, ya no hay vuelta atrás”, añadió.

En esta línea, los responsables del informe abogaron por una mayor visibilidad del impacto que tiene –y podría tener en el futuro– la actividad física para impulsar este cambio cultural. Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Empresarios de Instalaciones Deportivas (FNEID), Adolfo Ruiz, celebró en el estudio que la proliferación de gimnasios low cost ayuda a la incorporación de nuevos usuarios al deporte, pero pidió también medidas fiscales como la bajada del tipo de IVA.